Este otoño será sin duda un otoño complicado en el que los niños, los padres y los pediatras tendrán un papel significativo. Gripes, resfriados, infecciones de oído, gastroenteritis… ¡La vuelta al cole siempre implica la proliferación de virus y bacterias! 

 ¡Hoy te damos algunos consejos para prevenir, este año más que nunca, las enfermedades del otoño en los niños! 

Una buena higiene ante todo

Es el punto más importante de todos y también el más difícil de cumplir. Para evitar el contagio de virus y bacterias es importante lavarse las manos a menudo, sobre todo antes de comer o de tocarse las partes mucosas (nariz, boca, ojos…). A veces esto puede resultar complicado, por eso, es importante enseñarles el hábito de lavarse las manos antes de comer cualquier cosa. 

Alimentación equilibrada

Seguir una alimentación equilibrada es la clave para prevenir los resfriados y tener el sistema inmune fuerte. ¡Créales el hábito de comer saludable y busca que los alimentos que le gustan les aporten los nutrientes y las vitaminas que necesitan! 

Hidratación

Muchas veces los niños pueden sufrir deshidratación, lo que contribuye a una bajada de las defensas. Es muy importante hacerles beber agua mientras realizan sus tareas habituales: jugar, comer, hacer los deberes… 

La comida no se comparte

Enséñales que no pueden compartir la comida, y que no pueden comer varias personas del mismo plato ni beber del mismo vaso. ¡Esto es un reto educacional que ahora toma más importancia que nunca! 

Vida activa

Las nuevas generaciones cada vez tienen más deberes, y parece que tienen que estar más quietos en clase y disfrutar de las nuevas tecnologías (tablet, ordenador…). Tenemos que conseguir que se muevan, que salten, bailen o corran. Es importante que practiquen deporte y se mantengan activos. 

Una alimentación completa y equilibrada, un descanso prolongado y la actividad física moderada son los factores que más influyen a la hora de mantener altas las defensas de los niños. ¡Vamos! 🙂