Foie gras, asados, turrones, polvorones, alcohol… Después del descontrol de las comidas navideñas toca volver a encontrar el camino hacia una alimentación equilibrada y volver a la actividad física habitual. En este post, veremos algunos consejos que pueden ser de ayuda para volver a la rutina después de las vacaciones de Navidad.

  1. Reequilibrar la dieta

Una dieta equilibrada debe aportar al organismo proteínas (carne, pescado, huevos, lácteos, etc.), carbohidratos (pasta, arroz, pan, etc.), lípidos (aceite pescado azul, etc.), vitaminas, minerales y fibras. Después de este período festivo en que los menús han sido particularmente ricos y diversificados, es importante reequilibrar la dieta, Para hacerlo no es necesario caer en la monotonía, se pueden ir variando los sabores, colores y texturas de los platos.

  1. Frutas y verduras como plato estrella

Las frutas y verduras ayudan a regular el apetito: aportan vitaminas, minerales y pocas calorías. Además, su alto contenido en fibra facilita el tránsito. Comer al menos 5 frutas y verduras al día, o 3 porciones de fruta y 2 de verdura, hará que nuestro organismo se vaya habituando otra vez al ritmo normal.

  1. El agua como mejor aliado

Beber entre 1,5 y 2 litros diarios (parte de los cuales pueden ser aportados por los alimentos), favorece el transporte de los desechos corporales y su total eliminación.

  1. Cuidar las horas de sueño

Para recuperarse bien, es fundamental dormir bien. Después de las vacaciones, la fatiga puede amenazar, ya sea por el cambio de horarios, por las comidas prolongadas o por una dieta excesiva. En este caso, tener un sueño adecuado es tan esencial como mantener una dieta equilibrada.

  1. Recuperar la actividad física

Durante las vacaciones, solemos comer demasiado y movernos poco: las comidas duran mucho, lo que nos lleva a pasar largas horas en la mesa. No se trata de practicar una actividad física intensiva, sino una actividad física tranquila (como caminar rápidamente, andar en bicicleta o nadar) que permita tomar aire fresco, respirar, reforzar el sistema digestivo y eliminar las calorías acumuladas durante las vacaciones.

Siguiendo estos consejos conseguiremos que nuestro cuerpo se vuelva a acostumbrar a la rutina,  se “desintoxique” de los excesos típicos de las fechas navideñas y se sienta mejor.